Actuar es modificar la figura del mundo, disponer medios con vistas a un fin, producir un complejo instrumental y organizado tal que... la modificación aportada a uno de los eslabones traiga aparejadas modificaciones en toda la serie y, para terminar, produzca un resultado previsto.Luego dice que la acción es intencional, voluntad y propósito. Dice también que cuando se concibe otro estado de cosas donde nos vaya mejor, es decir, que podamos planificar e imaginarnos un estado de cosas posible desde nuestras capacidades donde estemos mejor, decidimos que el actual estado es insoportable. Si el sufrimiento del hombre no cambia no es porque esté habituado, sino porque no puede imaginar que las cosas puedan ser diferentes. Entonces no actúa "porque le faltan la cultura y reflexión necesarias para hacerle concebir un estado social en que los sufrimientos no existan". Parece que ciertas condiciones no les parecen accesorias o habituales sino naturales. Es decir, en cierto modo, esenciales. Ser obrero es ser pobre, lamentable, miserable, jodido, etc. Entonces desde esta situación en la que la condición es natural, no se puede concebir otra forma en la que las cosas fueran lo mismo pero mejores, es decir, no se puede pensar en ser un obrero que no sea miserable, que no esté bajo condiciones de trabajo penosas e indignas, que tenga más tiempo, mejor salario, etc. Y esto se repite hasta al absurdo en todas las condiciones humanas: la de la mujer que le toco ser mujer, la del católico, la del ingeniero, etc. Es decir, en cierto modo estas definiciones-distinciones nos llevan a la integración del hacer con el ser, como si nuestras condiciones externas fueran intrínsecas a lo que somos, una visión muy determinista. No podemos hacer otra cosa que no seamos. Obviamente, Sartre quiere romper con esto, en aras de ser más auténtico en oposición a la explotación. Contrapone dos situaciones: la responsabilidad individual versus la causalidad estructural. No niega la influencia de las condiciones, y lo resume en su famosa frase: siempre podemos hacer algo de lo que hicieron con nosotros.
P.S. (3.junio.2013)
Es difícil no hacer una reflexión sobre el presente, sobre las condiciones de los trabajadores actuales (los white-collar workers y los blue-collar workers). Un obrero de principios de finales del siglo XIX y principios del XX miraría asombrado a nuestra clase trabajadora y profesional. En este tiempo se comienza a cobrar conciencia de las condiciones de vida del proletariado, el trabajador comienza a rebelarse a raíz de las concepciones marxistas donde el generador del capital, el obrero, es paradójicamente el más empobrecido y en las peores condiciones. Comienzan entonces las luchas sociales: los derechos humanos, la prohibición de trabajo para los niños, la igualdad de género, la implementación de la jornada laboral de 8 horas, la seguridad universal, etc.
¿Por qué ha habido un retroceso? En mi opinión se ha educado a una sociedad entera bajo la premisa del trabajo-para-vivir. Quiero decir con esto que se ha implementado una conciencia de clase, un tipo de fusión del hacer con el ser. Quizá peque de reduccionista, pero se puede verificar con simplemente mirar el objetivo de toda la educación que recibe un ser humano: integrarlo a una sociedad consumista-productora de bienes y servicios. Compra y produce, produce y ganas, ganas y compras más. Y es bajo esta educación que un educando comienza a pensar que el trabajar (y trabajar más que otros) es intrínseco al ser humano. Un humano exitoso, un humano realizado es uno que logró trabajar y acumular bienes. El éxito profesional es la cumbre de nuestro sistema social. Cualquier cosa que tenga qué soportar un ser humano para lograr llegar a la cumbre es percibida como transitoria y necesaria, por ello todo es tolerable, incluso que abusen de nuestros derechos, abusar de los derechos de otros, aceptar cambios perjudiciales, dañar nuestro ecosistema, etc.